Olimerca.- Poco o nada ha cambiado en el mercado del aceite de oliva en origen. Las cortas disponibilidades que hay en manos de la producción, unido a la sequía que está afectando al cultivo en esta primavera y verano hacen un cóctel perfecto para que en estos días de finales de julio las cotizaciones de aceite de oliva en origen sean prácticamente un jeroglífico difícil de descifrar.

Al cierre de la tercera semana de julio se han detectado ofertas de aceites lampantes a 6,80€/kg, pero también la demanda se negaba a pagar por encima de los 6,70€/kg. Sobre todo porque lo que es incomprensible es que el aceite de oliva refinado estaba cotizando a 6,50 y 6,55€/kg; es decir costaba más barato un aceite ya refinado que un lampante.

En el caso de la categoría de virgen extra en el mercado se podía encontrar algunas partidas a 7,80€/kg e incluso a 8.80€/kg en función de las valoraciones organolépticas.

En definitiva, estamos en un contexto de situación única en el mercado del aceite de oliva en origen donde cada día se consolida la sensación de posibles nuevos ajustes al alza a partir de mediados de agosto, cuando ya se conozcan las cifras de salidas del mes de junio y se pueda avanzar con más detalle las previsiones de una cosecha que este año se presenta adelantada.

De hecho, muchos operadores consideran que este año es muy probable que en septiembre los olivares de cultivos superintensivos inicien su recolección temprana para aprovechar los buenos precios de final de campaña y adelantarse a la llegada de mayores volúmenes de aceites nuevos. Algo lógico y normal dado que los niveles actuales de precios van a suponer importantes beneficios para aquellos que tienen sistemas de cultivo cuyos costes de recolección son muy inferiores a los cultivos tradicionales.

Las únicas incógnitas que en estos momentos quedan sobre la mesa son: las salidas de aceite en el mes de agosto y septiembre y las estimaciones de cosecha 2023/24, que seguramente se den a conocer a finales de septiembre. Todos están valorando el volumen de existencias que habrá a finales de septiembre, con el agravante de que estiman que en Julio las salidas no van a experimentar bajadas respecto a las cifras de junio o mayo y esto puede suponer otra vuelta de tuerca en los precios en origen.

Hasta entonces, habrá que seguir hablando de precios inestables al alza y oferta muy sostenida mirando las existencias de aceite en sus bodegas.

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