Olimerca.- El abuso durante décadas de productos insecticidas ha podido provocar que las nuevas generaciones de la mosca del olivo hayan desarrollado una resistencia genética a dichos productos. Así lo han comprobado investigadores de Universidad Complutense de Madrid (UCM), cuya investigación ha revelado que la especie "Bactrocera oleae" (mosca del olivo) tiene en su ADN variantes que confieren resistencia a los insecticidas organofosforados.

Este hallazgo puede resultar de gran relevancia en el sector productivo olivarero, ya que el control de la mosca del olivo, la plaga más dañina en este cultivo, implica el empleo de productos químicos en los momentos de elevada densidad de la plaga,destacan desde la Universidad madrileña.

El estudio, cuyos resultados se han publicado en la revista "Insects" y en el que han participado investigadores del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria, analiza por primera vez una amplia muestra de las poblaciones de mosca del olivo del territorio español e incluye una muestra representativa de otros países mediterráneos.

Las plagas de insectos constituyen un problema creciente y un reto en el actual contexto de cambio global, por lo que toda la información genética obtenida resulta de utilidad en la toma decisiones relacionadas con su control

Según Esther Lantero, investigadora del Departamento de Genética, Fisiología y Microbiología de esta Universidad, "resulta fundamental encontrar alternativas efectivas que disminuyan de un modo notable la densidad de las poblaciones de la mosca del olivo".

En este sentido ha incidido en que, por ese motivo, los esfuerzos se deben centrar en la búsqueda de métodos biológicos, culturales, biotecnológicos o físicos que reduzcan el empleo de los productos químicos.