Olimerca.- El Consejo de Gobierno ha aprobado el 31 de julio el decreto regulador de la nueva Administración periférica de la Junta de Andalucía. Esta norma, que se enmarca en los objetivos de reducir el déficit público y mejorar la eficiencia de los recursos públicos, supondrá una disminución del 50% en el número de altos cargos en las provincias respecto a la anterior legislatura, al pasar de 97 a 49, así como un ahorro económico anual de alrededor de 2,7 millones de euros.

La nueva organización periférica persigue dotar a la Junta de una "administración más austera, eficaz y eficiente", y cumple con el objetivo de "racionalizar económica y administrativamente la estructura y profesionalizar los servicios que se prestan a la sociedad, confiando mayor peso técnico a las estructuras de las delegaciones del Gobierno y a los delegados territoriales".
El decreto establece un modelo de organización que conjuga la vigente estructura de las delegaciones del Gobierno de la Junta con la figura novedosa de las delegaciones territoriales. Estos centros directivos, cinco por provincia, gestionarán por áreas temáticas competencias hasta ahora desarrolladas por las delegaciones de las distintas consejerías.

Tres de las nuevas delegaciones territoriales ejercerán en la provincia las competencias de los departamentos del Gobierno andaluz con mayor carga de gestión: Economía, Innovación, Ciencia y Empleo; Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, y Salud y Bienestar Social. Las otras dos aglutinarán servicios y asumirán la representación de cuatro consejerías: Educación, Cultura y Deporte por un lado y Fomento, Vivienda, Turismo y Comercio por el otro.
Las delegaciones territoriales ostentarán la representación y asumirán los servicios periféricos de las consejerías a las que estén vinculadas, además de ejercer la jefatura del personal delegado.

En cuanto a las delegaciones de Gobierno de la Junta, el decreto potencia su papel como primera autoridad de la Administración autonómica en las provincias. Cada una de ellas contará con una oficina de la Vicepresidencia de la Junta y, además, integrará los servicios periféricos de las consejerías de Administración Local y Relaciones Institucionales; Justicia e Interior, y Hacienda y Administración Pública.

Finalmente, el decreto aprobado por el Gobierno andaluz crea la figura de las Secretarías Generales Provinciales, que serán los órganos sectoriales de las distintas consejerías en la Administración periférica y cuyas personas titulares se designarán entre funcionarios de carrera. Estas entidades dependerán de las delegaciones territoriales o directamente de las del Gobierno de la Junta en los casos de Administración Local y Relaciones Institucionales; Justicia e Interior, y Hacienda y Administración Pública.

Tras la reorganización de la Administración periférica aprobada, la Junta de Andalucía ha reducido en un 30% el número de sus altos cargos respecto al inicio de la anterior legislatura. A los 29 suprimidos en los servicios centrales se suman ahora los 48 en las provincias, lo que supone un ahorro global de 6,7 millones de euros anuales.