Olimreca.- Estos días se está produciendo la salida de adultos de barrenillo del olivo (Phloeotribus scarabaeoides) de los restos de poda, tal y como alerta la Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía. Estos se dirigen hacia los olivares cercanos, y pueden provocar daños en los brotes al realizar las galerías nutricias, con la consiguiente rotura de tallos, pérdidas de cosecha y debilitamiento general del árbol en el caso de que los ataques sean intensos.

Desde la RAIF recuerdan que la legislación vigente obliga que, entre el 1 de mayo y el 31 de octubre, donde haya leña y restos procedentes de la poda anual, deben de tomarse las medidas reguladas por la ley y que son las siguientes:

  • Tener leñeras herméticamente tabicadas y cerradas.
  • Realizar zanjas o trincheras, cubiertas con al menos 25 cm de tierra.
  • Albercas, quedando en este caso la leña cubierta de agua.
  • Cualquier otro método que suponga un aislamiento hermético de la leña al exterior.

La RAIF señala que es muy importante tomar estas medidas, ya que, en los olivares próximos a acumulaciones de leña, se producen daños muy importantes y la realización de tratamientos fitosanitarios es prácticamente ineficaz si se mantienen las leñas mal acondicionadas.