Olimerca.- La Comisión Europea ha presentado una serie de medidas a corto y medio plazo para mejorar la seguridad alimentaria mundial y apoyar a los agricultores, los ganaderos y los consumidores de la UE, teniendo en cuenta el aumento de los precios de los alimentos y de los costes de insumos como la energía y los fertilizantes. 

La disponibilidad de alimentos no está actualmente en juego en la UE, ya que el continente es en gran medida autosuficiente para muchos productos agropecuarios. Sin embargo, el sector agropecuario europeo es un importador neto de algunos productos. Esta vulnerabilidad, junto con los elevados costes de insumos como los fertilizantes y la energía procedentes de fuentes fósiles, está provocando problemas de producción para los agricultores y los ganaderos y corre el riesgo de hacer subir los precios de los alimentos.

Apoyo a los agricultores y consumidores de la UE
Así, para mejorar la asequibilidad de los alimentos, los Estados miembros podrán aplicar tipos reducidos del impuesto sobre el valor añadido y animar a los operadores económicos a contener los precios minoristas. Los Estados miembros también pueden aprovechar fondos de la UE, tales como el Fondo de Ayuda Europea para las Personas Más Desfavorecidas (FEAD), que sostiene las medidas de los países de la UE para facilitar alimentos o asistencia material básica a las personas más vulnerables.

El recién creado Mecanismo Europeo de Preparación y Respuesta ante las Crisis de Seguridad Alimentaria, que reúne a las Administraciones nacionales y europea y a interlocutores del sector privado de toda la cadena de suministro, llevará a cabo un análisis exhaustivo de los riesgos y puntos vulnerables de la cadena de suministro alimentario de la UE, seguido de las recomendaciones y medidas paliativas adecuadas.

Medidas
Para desempeñar su papel de proveedor mundial de alimentos, mientras mantiene su plena participación en la transición medioambiental, el sector agropecuario de la UE necesita apoyo. Con este fin, la Comisión ha adoptado las medidas siguientes:

  • Un paquete de apoyo de 500 millones de euros, que también hace uso de la reserva de crisis, para ayudar a los productores más afectados por las graves consecuencias de la guerra de Ucrania. Sobre esta base, los Estados miembros podrán facilitar ayuda financiera adicional a los agricultores y ganaderos para contribuir a la seguridad alimentaria mundial o hacer frente a las perturbaciones del mercado derivadas del aumento de los costes de los insumos o las restricciones comerciales. Debe darse prioridad al apoyo a los agricultores y ganaderos comprometidos con las prácticas sostenibles, garantizando al mismo tiempo que las medidas se dirijan a los sectores y a los agricultores y ganaderos más afectados por la crisis.
  • Más anticipos de los pagos directos, y medidas de desarrollo rural relacionadas con la superficie y los animales, con destino a los agricultores y ganaderos a partir del 16 de octubre de 2022.
  • Medidas de seguridad del mercado para sostener el mercado de la carne de porcino, habida cuenta de la situación especialmente difícil del sector.
  • Una excepción única y temporal para permitir la producción de cultivos destinados a la alimentación humana y animal en barbecho, manteniendo al mismo tiempo íntegramente el pago de ecologización a los agricultores. Esto ampliará la capacidad de producción de la UE a pesar de la limitada disponibilidad de tierras fértiles.
  • La flexibilización temporal específica de los actuales requisitos de importación de piensos contribuirá a aliviar la presión sobre este mercado.
  • La Comisión ha propuesto un nuevo e independiente Marco Temporal de Crisis, que también abarca a los agricultores y ganaderos, a los productores de fertilizantes y al sector pesquero. Así podrán concederse ayudas estatales a los agricultores y ganaderos afectados por grandes subidas de los costes de los insumos.
  • Se controlarán los precios de los fertilizantes y los suministros para los agricultores a fin de velar por no poner en peligro las perspectivas de las cosechas de la UE.