Olimerca.- La última semana del mes de Junio se ha cerrado en el mercado del aceite de oliva con una gran firmeza en el lado de la producción, mientras que los industriales envasadores siguen aguantando para no provocar nuevos repuntes, que tampoco se descartan en los próximos meses.

El problema es que a pesar de que los datos oficiales indican que a finales de mayo había en poder de la industria envasadora del orden de 211.000 toneladas se extiende la sensación en el conjunto de operadores de que este volumen no se reparte de manera equitativa entre las principales firmas envasadoras.

Es decir, si hace años los grandes grupos cooperativos se declaraban exclusivamente como productores, ahora también se clasifican como envasadores, con lo que no es de extrañar que firmas como Dcoop, Oleoestepa, Jaencoop, entre otras sean en estos momentos las que tienen en sus bodegas las mayores existencias, mientras que grandes envasadores como Migasa, Sovena y otros estén buscando día tras días partidas de cierto volumen para cubrir sus necesidades con los mercados.

Queremos decir que los que antes eran exclusivamente productores se están posicionando como grandes envasadores, con lo que el reparto de cuotas de existencia sería muy distinto al de hace unos años.

Se observa que a estas alturas de la campaña hay más existencias que las cuatro campañas anteriores, a pesar de que la comercialización mensual ronda las 107.000 toneladas.

Por ello no sorprende que, a pesar del repunte de precios en origen durante las últimas cuatro semanas, que ya ha posicionado el lampante en los 2,40€/kg y un virgen extra por encima de los 2,80€/kg, se siga observando interés comprador de grandes partidas de importantes envasadores como Migasa.

Y es que el sentir general es que la probabilidad de que baje el precio en los próximos meses es muy remota, mientras que la de subir las cotizaciones en origen se afianza.

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