Olimerca.- Los países del hemisferio sur de América Latina, como Argentina y Chile, arrancan estos días una campaña oleícola que viene marcada por las buenas previsiones así como por la crisis sanitaria mundial del coronavirus.

En Argentina, las previsiones apuntan a que este año se alcanzarán las 35.000 toneladas, frente a las 20.000 de la campaña anterior, aunque apuntan que esta cifra podría variar según avance la recogida de la aceituna.

En este país, aunque se han prohibido los trabajos no esenciales, los olivareros tienen permiso para realizar su labor, sin embargo, debido a expansión de la pandemia, en algunas zonas están teniendo más dificultades para encontrar trabajadores que quieran o puedan ir a recoger aceituna, tal y como publica Olive Oil Times.

Algunos productores ubicados en provincias más afectadas, como Mendoza, que ha tenido 113 casos y siete muertes hasta la fecha, son aún más propensos a encontrar escasez de mano de obra.
Sin embargo, en el noroeste de la provincia de La Rioja, con menos de una decena de infectados hasta la fecha, y siendo la mayor productora de aceite de oliva de América del Sur ya ha comenzado a cosechar sus olivares superintensivos.

Chile
Desde la asociación chilena de productores de aceite de oliva, ChileOliva, están alentando a los productores a avanzar con la cosecha antes de que se extienda la pandemia, y lo hagan respetando en todo momento las medidas de seguridad recomendadas por el Ministerio de Salud para proteger a los trabajadores y prevenir infecciones, lo que podría poner en riesgo la producción de este año.

Se espera que, gracias a las abundantes lluvias caídas en los meses previos, las variedades Coratina, Frantoio, Arbosana y Koroneiki, tengan una alta producción, mientras que para Arbequina, Leccino y Frantoio se espera un comportamiento normal.

Así, la industria chilena se está preparando para la recogida temprana de sus primeras aceitunas que den como resultado los primeros aceites de la campaña antes de que llegue el pico de la pandemia y se impongan mayores restricciones, que según el Ministerio de Salud de Chile será en mayo.