Packs de aceites para la exportación

Olimerca.- El problema del coronavirus va en aumento en todo el mundo y las empresas aceiteras, como el resto del mundo empresarial, están viéndose afectadas por todas las medidas que desde el Gobierno se están implementando para controlar la expansión del COVID-19.

En opinión de Antonio Gallego, Dtor Comercial del Grupo Migasa, “si hace unas semanas el primer problema con el que se enfrentaban las grandes empresas envasadoras y comercializadoras era contar con capacidad de suministro de aceite de oliva y otros aceites envasado para cubrir las necesidades de las grandes cadenas de distribución, en estos momentos la situación más complicada a la que nos enfrentamos es la caída de la demanda por parte del canal Horeca.
Los cierres totales de restaurantes, food service, hoteles, colegios y comedores colectivos han provocado un parón total de las salidas de todos tipos de aceites, que de momento no se está viendo compensado por el tirón del consumo doméstico de días anteriores, afirma Gallego.

Por su parte, Antonio Luque, presidente del Grupo Dcoop, considera que el sector se encuentra en estos momentos en un absoluto desconcierto e incertidumbre. Los grandes envasadores apenas si registran operaciones de compra venta en origen, y se limitan a retirar los aceites de contratos firmados con anterioridad.

De hecho, en el grupo Dcoop se están adelantando las entregas de aceites vendidos en semanas anteriores, previstas para los próximos tres meses, y se están adelantado de forma inmediata. Y por otra parte, ya estiman una pérdida del consumo de aceites por la pérdida del canal horeca, que podría compensarse de alguna manera por el consumo del hogar, sobre todo en la categoría de aceite de oliva.

Una de las primeras repercusiones de la crisis del coronavirus es que Dcoop ya ha tenido un aumento de las entregas de más de 30% en este mes de marzo, respecto a otros meses. Si la media de salidas es de 5 millones de litros mensuales, en febrero han sido de 7 millones y en marzo se espera alcanzar los 10 millones de litros. No obstante, considera Luque que en abril o mayo habrá algún parón justificado de ventas.

Desde la firma Acesur, el responsable del área comercial, Carlos Jimenez, opina que el hecho de que el aceite de oliva sea un producto de primera necesidad les permite a estas empresas un cierto privilegio en épocas de crisis. La única salvedad es el cierre de todos los centros Horeca que está afectando de manera importante a todos los industriales.

De cara al futuro, Jiménez considera que la alta demanda de aceites que han sufrido en las últimas semanas en el mercado interior se verá frenada en breve para recuperar los niveles normales en el mes de Abril. Los grandes envasadores tienen mucho aceite comprado y en stocks lo que garantiza dar salida a todos los pedidos.

Respecto al mercado exterior Acesur si ha observado un aumento de pedidos, tanto desde Europa como de EE.UU, Asía y Sudamérica.