Olimerca.- Coincidiendo con la presentación oficial del XII Symposium Nacional de Sanidad Vegetal, que tendrá lugar del 23 al 25 de enero de 2013 en Sevilla, la secretaria general de Agricultura y Alimentación, Judit Anda, ha resaltado la importancia de “la existencia de herramientas como la Red de Alerta e Información Fitosanitaria (RAIF), que permite realizar un análisis de riesgo y de control de plagas y enfermedades para llevar a cabo “un uso eficiente de los recursos y obtener los mejores resultados con el menos coste posible”. 

Este sistema de información ofrece datos detallados y actualizados semanalmente sobre la situación fitosanitaria de los cultivos para responder a las necesidades del sector. 

La puesta en marcha de este sistema supone un adelanto a los planteamientos de la normativa europea que establece el marco de actuación para conseguir un uso sostenible de los plaguicidas. Esta Directiva impone la Gestión Integrada de Plagas como una obligatoriedad desde el 1 de enero de 2014 y establece que los estados miembros deben velar por que los usuarios de estos productos dispongan de la información y los instrumentos necesarios para el seguimiento de las plagas, así como de servicios de asesoramiento sobre la gestión integrada de plagas.

Durante su intervención, Antonio Vergel ha explicado que “España está totalmente preparada para aplicar esta nueva normativa”, puesto que este modelo de gestión de plagas ya lo cumplen aquellos productores que practican Agricultura Ecológica certificada, Producción Integrada, producción certificada como Globalgap, entre otros. “Por lo tanto, en España se están haciendo las cosas muy bien. El agricultor es un profesional, capaz de adaptarse a esta realidad. Sólo tenemos que informarle de que adoptar la Gestión Integrada de Plagas va a ser un valor añadido más para su producción”, ha declarado.

Desde la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente se ha apostado desde el principio por herramientas como la RAIF, basadas en la transferencia de información al sector mediante el uso de nuevas tecnologías. Este respaldo se ha materializado en la inversión de más de cinco millones de euros en los últimos cinco años a través del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) del Programa de Desarrollo Rural (PDR) de Andalucía.

Además, desde 2008 la Junta de Andaucía ha apoyado el funcionamiento de las Agrupaciones de Producción Integrada (API) con más de 21,6 millones de euros, de las Agrupaciones de Tratamiento Integrado (Atria) con 1,7 millones y la adquisición de insectos auxiliares para el tratamiento de plagas mediante técnicas de Control Biológico con 30 millones de euros. Un respaldo al que se suman las ayudas agroambientales de ecológico y Producción Integrada de arroz, algodón, remolacha y olivar concedidas en estos años.  

La Comunidad Autonoma andaluza cuenta actualmente con más de 1,54 millones de hectáreas bajo técnicas de producción sostenible que cumplen la normativa de gestión integrada de plagas. De ellas, alrededor de un millón de hectáreas se dedican a Producción Ecológica, más de 460.000 a Producción Integrada, 20.000 a Control Biológico y un total de 88.000 hectáreas están incluidas en alguna Agrupación de Tratamiento Integrado.