Olimerca.- Un trabajo sobre la aplicación de compost y la reducción de fertilización nitrogenada en olivares sostenibles de alta densidad en el Valle Central de California (Applying compost and reducing nitrogen fertilization promotes sustainable olive production in super-high-density orchards in California’s Central Valley) ha obtenido el VII Premio Internacional Castillo de Canena de Investigación Oleícola ‘Luis Vañó’, que convoca la compañía oleícola con la colaboración de la UJA y de la Universidad de California en Davis.

Este trabajo contribuye con recomendaciones de nutrientes para plantaciones de olivos de densidad súper alta en California, tanto en lo referente a la tasa de fertilización con N inorgánico, como al efecto sobre la dinámica del ciclo del nitrógeno y las emisiones de gases de efecto invernadero. Sus autores son los investigadores Andrew J. Curtright, Savannah Haas y William H. Horwath (Universidad de California en Davis) y Xia Zhu-Barker (Universidad de California en Davis y Universidad de Wisconsin-Madison).

En el acto de entrega de este galardón, celebrado en el Castillo de Canena, el propio Luis Vañó recordaba que “en el año 2010, la empresa que presido decidió crear un premio de ámbito internacional que incentivara la investigación y potenciara el conocimiento en materias tan importantes como la olivicultura y la elaiotecnia en su dimensión más amplia”.

“El trabajo que ha resultado ganador en esta edición del Premio trata con especial profundidad los problemas dentro del campo del olivar y de la producción de aceite de oliva”, afirmaba Luis Vañó

En el mismo, el profesor Curtright y su equipo analizan la utilización de fertilizantes orgánicos, como es el compost, en plantaciones superintensivas de olivos en el Valle Central de California. Según se demuestra en el estudio, no exceder la demanda óptima de Nitrógeno es crucial para la sostenibilidad de los cultivos de olivar y la reducción de los riesgos medioambientales aparejados a la aplicación excesiva de este macronutriente, práctica desgraciadamente muy común entre nuestros olivareros.

Vañó destacaba también que “el trabajo ganador del premio enfatiza la importancia de una aplicación racional de los fertilizantes nitrogenados para minimizar los impactos negativos sobre el ecosistema como son la lixiviación de nitratos y la emisión de óxido nitroso (N2O). Además, se subraya la potencialidad del uso del compost orgánico como ejemplo palmario de ecoeconomía circular, así como enmendante de suelo, enriquecedor de su fertilidad y potenciador de la sostenibilidad en la producción oleícola. El uso de bajas dosis de N orgánico aplicado a través del compost no ha tenido, según el trabajo del equipo de la UC DAVIS, ningún impacto negativo ni sobre el contenido oleico de los frutos, ni sobre la calidad físico-química u organoléptica de los AOVEs obtenidos”.

Por su parte, el Rector de la Universidad de Jaén, Nicolás Ruiz, se refería a este reconocimiento como un premio que “estimula el conocimiento científico y tecnológico en el sector del olivar y del aceite de oliva” y ha felicitado a la familia Vañó por esta iniciativa que “pretende generar nuevo conocimiento y aplicarlo para mejorar el sector oleícola”. “Este certamen es una de las formas de dar respuesta a la necesidad que tiene el sector oleícola de apostar por la investigación y la innovación. En sentido, la Universidad de Jaén y la compañía Castillo de Canena compartimos un objetivo clave para el desarrollo de nuestro territorio: modernizar y fortalecer nuestra agricultura, nuestra agroindustria y nuestras capacidades de comercialización, a través de la investigación, la innovación y la apertura de nuevos mercados”, declaraba Nicolás Ruiz.