Olimerca.- A pesar de no ser una región de grandes producciones de aceite de oliva en España, el sector oleícola en Castilla y León podría estar en peligro. En la última década la producción ha descendido un 35,7%, y cerca 6.000 toneladas, hasta situarse en las 10.563 toneladas frente a las casi 16.500 de 2010. Sin embargo, su superficie de cultivo no ha sufrido grandes variaciones, por lo que esta caída de la producción podría deberse a escasa rentabilidad que deja a los olivareros.

Según señala el Diario de Ávila, las provincias que aglutinan casi el total de la producción de aceituna en la región son Ávila, Salamanca, Valladolid y Zamora, con una caída generalizada en todas ellas en la última década. En Ávila ha descendido un 46,3%, hasta las 5.155 toneladas el año pasado; en Salamanca la caída fue del 33,3% (2.366 toneladas) y apenas varió la producción en el caso de Valladolid, donde la producción de aceituna en 2019 fue de 2.710 toneladas.

La mayor parte de la producción de aceituna en Castilla y León se destina a almazara, con 10.162 toneladas el año pasado frente a las 401 toneladas que se destinaron a aceituna de mesa, producida en su totalidad en la provincia de Salamanca. Las zonas de producción más tradicionales se mantienen en el sur de Ávila y también en las Arribes del Duero, entre las provincias de Salamanca y Zamora.