Olimerca.- Con un 37%  de la superficie el olivar de riego, fija al 56% de la población del planeta, a la vez que genera un volumen de negocio que, del mismo modo, supera ampliamente al olivar de secano, es decir, 4,3 millones de hectáreas  de olivar de riego, fijan a más de la mitad de la población mundial que viven del sector, y genera algo más del 50% del volumen de negocio que la actividad brinda en el ámbito internacional, suponiendo menos del 40% de la superficie global.

Así se desprende del informe Olivicultura Internacional, Sostenibilidad, Eficiencia y Afianzamiento Poblacional Gracias a la Cultura del Agua, elaborado por Juan Vilar Consultores, a petición y por encargo de Azud en un entorno, que cada vez hace del agua un recurso, tan preciado, como limitado.

En este estudio se analizan los sistemas de riego en el olivar demostrando que mejoran la productividad y rentabilidad de las explotaciones, por lo que aconseja que debe optarse por la modernización y digitalización de los cultivos haciendo un uso racional de los recursos hídricos, que se encuentran muy limitados.

Asimismo, de este informe se deduce que, el olivar que dispone de agua y la utiliza mediante sistemas innovadores de regadío que optimicen el uso del recurso del agua, no solo aumenta la competitividad de la explotación por el incremento de la productividad y el aumento de calidad de sus cosechas, si no que afecta positivamente y de manera directa a todo el entorno social y medioambiental donde se establece ya que la olivicultura irrigada puede desempeñar una función importante en la inversión de los efectos negativos sobre el medio ambiente, por ejemplo, almacenando carbono en los suelos, mejorando la filtración del agua y conservando los paisajes rurales y la biodiversidad, así como reducir los procesos de pérdida de población, abandono y envejecimiento de las zonas rurales.

Y del mismo modo resultaría especialmente interesante la gestión unificada de la agricultura  de precisión con la gestión eficiente de la energía en sus principales países productores de la cuenca mediterránea.

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