Olimerca.- Para satisfacer las necesidades del riego en el olivar debido al cambio climático, el Instituto de Ciencias de la Vida de la  Scuola Superiore Sant'Anna en Pisa ha realizado una investigación sobre los efectos que podría tener sobre las aceitunas y su producción de aceite de oliva el riego con agua salada.

Este estudio, realizado en colaboración con Luisa Hernández y José M. Martínez Rivas, investigadores del Instituto de la Grasa (CSIC) en Sevilla revela, por primera vez, los mecanismos de acumulación de sodio en el fruto del olivo y los efectos sobre los genes reguladores de la ruta biosintética de los ácidos grasos.

De él se desprende que la salinidad provocó una aceleración del proceso de maduración, aumentó el número de frutos y disminuyó el contenido total de ácidos grasos en MG3. También se detectó un aumento en el ácido oleico en MG1 (53%), con el consiguiente aumento en el oleico / linoleico (41%) y una disminución en las relaciones poliinsaturadas/monoinsaturadas (30%).

Según el estudio, esas variaciones podrían explicarse por la regulación sinérgica de OeSAD1, junto con la regulación por disminución de los niveles de transcripción de OeFAD6.

Desde la Scuola Superiore Sant'Anna señalan que se trata de una “información esencial para evaluar el uso de agua salada y satisfacer las necesidades de riego en ambientes mediterráneos expuesto a cambios drásticos causados ​​por el cambio climático.