Olimerca.- En Cataluña, el período actual de déficit de precipitación acumulado ya supera el episodio reciente más intenso de sequía, el vivido en el período 2007-2008. Inmersos en la situación de mayor gravedad de toda la serie climática, esta situación es equiparable a otras catástrofes naturales, dado que produce graves efectos sobre la producción agrícola, que es altamente sensible a las adversidades climáticas.

Ante esta situación, el Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural reconoce el actual período de sequía como un fenómeno meteorológico grave y, en consecuencia, ha determinado flexibilizar algunos de los requisitos de la Política Agrícola Común (PAC) por en la campaña de 2024.

Lo ha hecho mediante una Orden que publica el Diario Oficial de la Generalidad de Cataluña (DOGC) el jueves 11 de abril.

Así, quiere "aliviar la situación de estrés financiero" de las explotaciones derivada del impacto de la sequía, que ha sostenido que será más frecuente e intensa en las próximas décadas por el cambio climático.

En el sector agrario catalán, esta flexibilización se concreta sobre determinados requisitos, condiciones de subvencionabilidad, y compromisos de las ayudas asociadas al Contrato Global de Explotación (CGE) de la Política Agraria Común para la campaña de 2024.