Olimerca.- Cargill, en colaboración con la organización internacional sin ánimo de lucro Solidaridad y la empresa comercial internacional colombiana C.I. Biocosta S.A., ha anunciado un nuevo programa de sostenibilidad de pequeños productores de aceite de palma en Colombia con el objetivo de mejorar las prácticas agrícolas y los medios de subsistencia de los agricultores. El programa de dos años fortalecerá las operaciones en cooperación con más de 480 agricultores cultivadores de palma a través de capacitación y asistencia técnica.

Esta es la primera iniciativa de Cargill en América Latina centrada en la producción responsable de aceite de palma. Con Solidaridad y Biocosta, que es la base de proveedores de Cargill para productores y molinos, Cargill promoverá la adopción de la Mesa Redonda sobre Principios y Criterios de Aceite de Palma Sostenible. Esto permitirá a los pequeños agricultores aumentar la productividad, la rentabilidad y el acceso a los mercados con prácticas sostenibles y certificación de etiqueta ecológica.

"Este programa apoya el compromiso de Cargill de construir una cadena de suministro de palma 100 por ciento transparente, trazable y sostenible para 2020", dijo Robert Horster, director global de comercio de Cargill's Edible Oils Solutions. "Nuestra meta es estimular la inclusión de los agricultores colombianos en el mercado global de aceite de palma, aumentar sus medios de vida y establecer mejores prácticas en agricultura sostenible".

El aceite de palma es uno de los tres principales cultivos en Colombia después del café y las bananas. Por ello, ños productores del noroeste de Colombia que participan en el programa recibirán capacitación y apoyo directos sobre buenas prácticas agrícolas y técnicas mejoradas de manejo agrícola que abarquen áreas clave de salud y seguridad y manejo de impacto ambiental y social.

Biocosta, líder en las exportaciones colombianas de aceite de palma, incluye cerca de 700 pequeños agricultores, que representan casi el 50 por ciento de la producción de aceite de palma en la región norte y impulsan el desarrollo socioeconómico.

Paralelamente al nuevo programa, Cargill, Biocosta y Solidaridad realizarán un estudio de impacto social y ambiental para evaluar tierras de alto valor de conservación y evaluar los riesgos de deforestación para integrar plenamente a los productores de aceite de palma en cadenas de suministro sostenibles.