Olimerca.- La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) ha pedido al Gobierno que incluya 5.200 millones de euros en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española para modernizar el millón de hectáreas aún pendiente, que debe remitirse a la Comisión Europea antes del 15 de octubre.

En la carta que la Federación ha enviado al presidente, Pedro Sánchez, alega que estas obras de modernización casan perfectamente con los objetivos marcados por las autoridades comunitarias para conceder los fondos europeos. Sobre todo, en torno a la lucha contra la contaminación y la despoblación de las zonas rurales.

Fenacore urge al Mapa a aprobar un Plan de Regadíos, tal y como ha formulado en la tercera alegación a los Esquemas Provisionales de Temas Importantes del tercer Ciclo de Planificación, sometidos a consulta pública hasta finales de octubre.

Fenacore defiende que la modernización del regadío mejora la calidad del agua, reduce el uso de abonos y herbicidas, y eleva el nivel socioeconómico de los re­gantes

Los regantes instan a que este Plan de Regadíos ayude a que los Presupuestos de la Unión Europea, los Presupuestos Generales del Estado y los de las comunidades autónomas incrementen las dotaciones para modernizar regadíos, alegando la rebaja del 16% en el consumo de agua que han logrado en la última década.

En este sentido, Fenacore denuncia la falta de inversión en regadíos por parte de las Confederaciones Hidrográficas, pese a que los organismos de cuenca ingresan directamente de los regantes alrededor de 100 millones de euros de tarifas y cánones todos los años.

Casi 3 MM de has modernizadas
No obstante, la Federación recuerda que más del 76% de la superficie de riego existente en España, casi 3 millones de hectáreas, se encuentra modernizada. En concreto, el 53% de la superficie regada está dotada con sistemas de riego localizado, considerado el más eficiente. Un porcentaje que multiplica por nueve el que se registra a nivel mundial, donde apenas un 6% de los cultivos se riegan con este tipo de sistemas. Además, hay otro 25% de cultivos que usan el sistema, también modernizado, basado en la aspersión.

Por otra parte, Fenacore defiende que la modernización mejora la calidad del agua, reduce el uso de abonos y herbicidas, y eleva el nivel socioeconómico de los re­gantes al aumentar la productividad de la tierra con nuevos cultivos de mayor valor añadido y que normalmente tienen una menor dependencia de subvenciones. Lo que, a la postre, ayuda a consolidar el sistema agroalimentario asocia­do al regadío y a vertebrar los territorios rurales.