Chorro de aceite de oliva

Olimerca.- La primera semana del mes de junio se va a cerrar en el mercado del aceite de oliva en un clima de gran estabilidad a nivel de operaciones, pendientes sobre todo de los próximos datos relativos al comportamiento de las salidas del mes de mayo. 

Este clima de relativa tranquilidad está dominado por los movimientos de compra de los grandes industriales envasadores que viven muy pendientes de los futuros excedentes y los stocks de cara a la próxima campaña; pensando sobre todo en los posibles efectos en el comportamiento de los precios a la baja y de ahí que el conjunto de operadores envasadores esté actuando con coberturas cortas de cara a la distribución.

A escasos cuatro meses para el inicio de la nueva cosecha, el drama está en estos momentos en que cada día que pasa el balance económico del sector se sitúa por debajo del umbral de la rentabilidad, con el consiguiente daño a olivareros y almazaras. Y es ante esta situación, que ya se vislumbra inevitable, donde el sector cooperativo parece que quiere mover ficha e iniciar un proceso negociador para regular la oferta actual y sobre todo la que se avecina, en la búsqueda de reducir o paliar los efectos perniciosos que puede sufrir el precio del aceite de oliva en origen.

A escasos cuatro meses para el inicio de la nueva cosecha, el drama está en estos momentos en que cada día que pasa el balance económico del sector se sitúa por debajo del umbral de la rentabilidad

Nuestro sector cuenta con herramientas que podrían utilizarse para evitar la ruina de tan importante industria agroalimentaria. Recordar el Real Decreto en su artículo 167 bis que permite que los estados miembros, ante circunstancias adversas, puedan retirar aceite del mercado siempre y cuando los excedentes pudieran distorsionar el buen funcionamiento del mercado. Una medida que si se quiere implementar debería de llevarse a cabo antes del 30 de septiembre, antes de que se inicia la campaña 2025/26.

Y mientras que se debaten las actuaciones a abordar, me gustaría comentar una iniciativa que se está poniendo en marcha en el sector de la naranja para industria y que podría convertirse en un claro referente para nuestro sector del aceite de oliva

Se trata de una integración vertical en Andalucía liderada por el gran grupo cooperativo Dcoop, que busca una concentración de la oferta ordenada y que permita competir con grandes industrias como García Carrión, que es la firma que lidera la compra de naranja para la industria y que ya viene varios años atrás fijando precios inamovibles a los agricultores.

Con esta integración se conseguiría dar un gran paso en pro del sector de la naranja andaluza y que podría servir de modelo de referencia para que nuestros líderes del sector tomen nota para el futuro que se nos avecina de grandes cosechas, no sólo en nuestro país, sino en otros países competidores.

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