Olimerca.- Hasta la fecha, el algodoncillo es un problema localizado en determinadas zonas de los municipios citados que no representa un problema de interés fitosanitario para el resto de la provincia. Así lo aseguraron ayer la delegada territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de Andalucía, Soledad Aranda, y el director general de la Producción Agrícola, Daniel Quesada, aunque “son los técnicos deben marcar las pautas para el control de esta plaga en aquellos casos en los que sea necesario”.  

"El Prays está siendo elevado en numerosos olivares y, seguramente, se producirán daños, aunque hasta la fecha se registra un buen cuaje de la aceituna"

En una reunión con los representantes provinciales de las Organizaciones Profesionales Agrarias (OPAs) y Cooperativas Agroalimentarias de Jaén, Aranda y Quesada advirtieron de que el Prays está siendo elevado en numerosos olivares y, seguramente, se producirán daños, aunque hasta la fecha se registra un buen cuaje de la aceituna.  

Tras escuchar la opinión de las diversas organizaciones convocadas se concluyó que es necesario disponer de un mayor número de asesores en gestión integrada de plagas, incrementando la presencia de las API en la provincia; así como impulsar la formación de los agricultores en la gestión integrada de plagas y el manejo del cultivo para incrementar la presencia de la fauna auxiliar que ha demostrado ser imprescindible para el adecuado control de esta plaga, respaldándose en los conocimientos adquiridos a través del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (IFAPA) y de otros centros de investigación. 

Actuaciones para combatir la plaga 

Durante el encuentro se expusieron las actuaciones realizadas por la Consejería de Agricultura para atajar el problema de la plaga de algodoncillo que, desde el año pasado, viene afectando a zonas determinadas de los términos municipales de Villanueva del Arzobispo, Villacarrillo, Iznatoraf, Sorihuela del Guadalimar y Beas de Segura (Jaén).  

En este sentido, destacaron la implementación de diferentes acciones como, por ejemplo, la realización de dos jornadas formativas en Villanueva del Arzobispo, donde se dio a conocer la estrategia marcada por el informe y los ensayos desarrollados por el Laboratorio de Sanidad Vegetal de Jaén.  

Las jornadas formativas, las salidas de campo por parte del personal técnico de la Junta de Andalucía o el lanzamiento de alertas, actuaciones para combatir el Prays

Asimismo, se tramitó el permiso de dos usos secundarios y una autorización excepcional para que los agricultores dispusieran de productos fitosanitarios autorizados para el control de esta plaga, tanto en la producción convencional como en la ecológica. 

Otra de las medidas puestas en marcha han sido las salidas de campo por parte del personal técnico de la Junta de Andalucía para determinar el momento idóneo de la aplicación de los tratamientos, realizadas en colaboración con el personal de los servicios técnicos de las Agrupaciones de Producción Integrada (API) y los asesores en gestión integrada de plagas; o el lanzamiento de avisos relacionados con esta plaga a través de la Red de Alerta e Información Fitosanitaria. 

Adicionalmente, los representantes de la Consejería de Agricultura destacaron que desde el Gobierno de Andalucía se han mantenido reuniones periódicas con los técnicos de la zona para llevar a cabo el seguimiento de la evolución de esta plaga y señalaron que, en la última reunión del 30 de mayo, el informe técnico apuntó que, la situación con respecto del algodoncillo es mucho mejor que la del año pasado y se han reducido las poblaciones afectadas.