Olimerca.- La agrupación Probiomasa ha calificado de inaceptable e inasumible el establecimiento de una tasa del 4,5 % sobre la generación de las plantas de biomasa que baraja el Gobierno, puesto que supondría dar la puntilla definitiva al sector, ya muy injustamente castigado de por sí por la moratoria.

En un comunicado remitido a los medios de comunicación, Probiomasa afirma que las biomasas no tienen ni han tenido responsabilidad alguna en el déficit de tarifa, al suponer su retribución un 1,9 % sobre el total de las primas del régimen especial. Si la tasa finalmente se aplicase en los términos anunciados, las plantas de biomasa en funcionamiento correrían un serio peligro de quedar abocadas a la suspensión de su actividad productiva.

El nuevo gravamen mermaría un tejido empresarial sólido y un cuantioso número de empleos estables en su ámbito, en los sectores agrícola, ganadero y forestal del medio rural, a pesar de los exiguos márgenes con los que cuentan y la escasa comprensión demostrada por parte de los sucesivos poderes políticos.

A su juicio, la nueva tasa pondría en un riesgo sin precedentes al sector español de la biomasa, al imposibilitar alcanzar una rentabilidad que permita asumir el sobrecoste, ya que actualmente se trabaja con márgenes tremendamente ajustados.

Probiomasa advirtió de que la medida incrementará el insoportable paro registrado en España, los costes derivados de la compra de derechos en el mercado de emisiones, así como la producción y abandono de residuos, provocando contaminantes ambientales y la quema incontrolada de millones de hectáreas de bosques.

Probiomasa pide al Gobierno que reconsidere la imposición de la tasa y otorgue a la generación de energía por medio de biomasas un tratamiento acorde con lo que se viene haciendo en la mayoría de los países de la Unión Europea.