Investiadores UJA - etiquetado alimentos

Olimerca.- Un equipo del Departamento de Organización de Empresas, Marketing y Sociología de la Universidad de Jaén (UJA) ha diseñado un sistema de clasificación de alimentos más sencillo e intuitivo. La idea se centra en facilitar la decisión del consumidor que, en ocasiones, duda sobre adquirir uno u otro artículo, ya que no queda del todo claro cuál es mejor o qué características contienen.

El planteamiento consiste en establecer recomendaciones generales para desarrollar protocolos eficaces. Con este método, se prueban distintas combinaciones para ver la más adecuada. Para ello, se analiza si es conveniente emplear denominaciones cortas o largas, números, colores, signos o símbolos, para definir la calidad de un producto y facilitar la decisión al adquirirlos.

Su aplicación tendría repercusiones positivas desde el punto de vista de la salud y protección ante engaños

El aceite de oliva es un claro ejemplo. El profesor de la UJA, Francisco José Torres, asegura que las actuales denominaciones de este alimento confunden a las personas. En este sentido, la palabra refinado puede llevar a equívocos, al creer que posee más propiedades o está mejor elaborado que un virgen extra. La solución que propone es clasificarlos de forma similar a los hoteles, donde según el número de estrellas que posea, se entiende claramente el nivel del establecimiento. Una opción podría ser etiquetando con el símbolo de tres, dos o una aceituna, dependiendo de si tiene más o menos categoría.

El modelo permite realizar orientaciones generales para buscar un sistema universal. Los resultados del estudio aparecen en el artículo 'In search of a consumer-focused food classification system. An experimental heuristic approach to differentiate degrees of quality', publicado en la revista Food Research International.
El problema, según Torres, es que la mayoría de las propuestas actuales son erróneas, se prestan a confusión. Es el caso del aceite de oliva, que no se sabe cuál es el que tiene mayor calidad.

Aplicando terminos similares a la clasifiación de Hoteles

Como alternativa, desde la UJA se ha desarrollado una técnica para determinar si son o no claros y efectivos. Una idea para el aceite es identificar el de más valor con una etiqueta donde aparezca la imagen de aceitunas, disminuyendo el número de éstas cuanta menos calidad tenga el producto.

El método se puede emplear en diversos productos. "En el momento que hay distintos niveles de calidad, a cualquiera", indica el experto, como el zumo de naranja embotellado, donde los consumidores tienen dudas sobre cuál es el mejor, si el concentrado o el néctar, por ejemplo. "Los sistemas de clasificación de alimentos buscan palabras que suenan todas muy bien pero que muchas veces se prestan a confusión", afirma Francisco José Torres.

Su aplicación tendría repercusiones positivas desde el punto de vista de la salud, protección ante engaños, o en los mercados, donde se produciría una discriminación de precios en función del valor real de los productos. "Todo lo que sea eliminar confusión en el consumidor, facilitarle el aprendizaje y ayudar a eliminar y a controlar el fraude es súper útil", subraya el profesor Torres.

El estudio, que ya ha finalizado, forma parte de un proyecto de excelencia de la Junta de Andalucía, financiado por la Consejería de Conocimiento, Investigación y Universidad y por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.