Olimerca.-  La tercera semana del mes de mayo está a punto de cerrarse y lo único destacable ha sido que no ha habido novedades respecto a lo que venimos comentando días atrás.

Estamos en un mercado donde en estos momentos reina la calma, y con unos industriales envasadores que mantienen unas existencias en torno a las 200.000 toneladas, lo que sin duda les permite esperar acontecimientos en las próximas semanas.

Aunque faltan todavía un par de semanas para conocer el comportamiento de las salidas del mes de mayo, los distintos operadores no dudan en afirmar que este mes sí que será significativamente inferior, respecto a los meses anteriores. La subida de precios no tiene vuelta atrás y las exportaciones y el consumo interior se siguen resintiendo.

En este contexto, sin agobios por vender por parte de las almazaras y sin muchas ganas de comprar por parte de los envasadores, ahora todos miran con un cierto optimismo la evolución de la floración en el olivar. Quedan muchas semanas por delante, pero lo que es innegable es que el olivo está repleto de flores, con una fuerza y un vigor espectacular, tras el descanso de la campaña anterior.

Y como siempre hay alguno que especula sobre lo que puede dar de sí la cosecha, por muy pronto que sea, ya hay apuestas de que la cosecha podría partir desde 1.300.000 toneladas a 1.600.000. Da igual la cifra que sea. Será una buena cosecha, si el clima no la estropea, y eso es la mejor inyección de optimismo que necesita el sector.