Conscientes del valor estratégico del sector oleícola de Jaén, el Consejo Económico y Social de la provincia de Jaén –CES- ha elaborado un estudio en el que recoge unas consideraciones y recomendaciones, fruto del análisis, debate y consenso de los 30 miembros que lo conforma, articuladas en cinco ejes estratégicos

EJE 1. Aumento de la competitividad de las empresas

1.    Aumentar la dimensión de las empresas oleícolas, mediante fórmulas de cooperación y/o fusión que permitan la concentración de la oferta, reducir los costes de actividad, aumentar la rentabilidad, reequilibrar el poder en la cadena de valor y/o diseñar y ejecutar acciones comerciales de cierta envergadura.

2.    Reducir los costes del olivar mediante la intensificar el cultivo cuando el terreno presente una orografía favorable, incluso en terrenos sin disponibilidad de agua –olivar intensivo de secano o con riego deficitario. En las zonas donde no sea posible la reestructuración hay que apostar por estrategias de cultivo compartido o cultivo asistido para reducir los costes de producción.

3.    Posicionar el sector olivarero provincial como un agrosistema de alto valor ambiental, un sector proveedor de bienes públicos y de productos saludables y de calidad para la población.

4.    Fomentar la eficiencia productiva y la sostenibilidad medioambiental. En este sentido, es fundamental la gestión eficiente del agua y el cuidado del medio ambiente mediante técnicas de cultivo que contribuyan a la lucha contra la erosión, el cambio climático y el mantenimiento de la biodiversidad.

5.    Promover el cultivo ecológico que contribuya a mantener la biodiversidad del medio ambiente y la riqueza de nuestros Parques Naturales.

6.    Diversificar la producción agraria provincial mediante el estudio de viabilidad de nuevos cultivos que puedan ser compatibles con el olivar o sustitutivos, que generen empleo, aporten rentas y fijen poblaciones en el medio rural.  

7.    Potenciar la diversificación concéntrica en torno al olivar y a la producción de aceites de oliva, a través del desarrollo de la “oleicultura agro energética” (biomasa, hueso, orujillo, etc.). Otras líneas de diversificación concéntrica son la obtención de productos de alto valor añadido, el desarrollo de líneas de productos en las industrias de cosmética, parafarmacia, conservas, cárnicas. Respecto del oleoturismo valoramos la iniciativa “Oleotur Jaén” impulsada por la Diputación Provincial de Jaén, a la que han de unirse más empresas oleícolas.

EJE 2. Calidad y defensa de la autenticidad de los aceites de oliva

8.    Elaborar aceites de oliva de calidad y seguros en su integridad, esto es, producidos respetando el medio ambiente.

9.    Instaurar en las empresas oleícolas sistemas de gestión de la calidad certificada que permitan una diferenciación de la oferta.  

10.    Adelantar la campaña de recolección de la aceituna para obtener aceites de oliva vírgenes extra y evitar la subida de ésteres alquílicos por la fermentación de los frutos demasiado maduros, que supone una barrera para la comercialización.

11.    Instar a las Administraciones competentes a que incrementen la vigilancia del cumplimiento de los parámetros físico-químicos, organolépticos y de autenticidad de los aceites de oliva producidos y comercializados.  

12.    Reforzar el papel del Consejo Oleícola Internacional respecto a la unificación de las normas de calidad a nivel internacional, armonizando el funcionamiento del análisis sensorial, e incorporar el mayor número de países al mismo para evitar barreras no arancelarias.

EJE 3. Desarrollo y comercialización de los aceites de oliva envasados

13.    Intensificar las acciones de comunicación con la finalidad de que siga aumentando la  demanda mundial de aceites de oliva. Las acciones de comunicación han de estar centradas en la calidad de los distintos aceites de oliva, en especial, sobre los vírgenes extra. Si los/as consumidores/as  diferencian los aceites de oliva existentes en el mercado, asumen sin mucha dificultad el sobreprecio de los de más calidad. En este sentido destacar la labor de la Organización Interprofesional del Aceite de Oliva Español y  la Diputación Provincial de Jaén.

14.    Promover los valores de los aceites de oliva como parte de la cultura provincial. En este sentido, son necesarias acciones formativas dirigidas al alumnado de educación infantil y de secundaria.

15.    Realizar acciones de comunicación en forma de “catas”, destinadas, tanto a los consumidores potenciales y actuales, como a los propios olivareros provinciales, al objeto de lograr un mayor conocimiento de los distintos aceites de oliva y de sus características diferenciales, así como un mayor reconocimiento y valoración de los esfuerzos y el coste de la calidad.

16.    Instar a las Administraciones competentes a que modifiquen las actuales denominaciones genéricas de los aceites de oliva. La situación actual perjudica a los/as consumidores/as y a lo/as productores/as.
 
17.    Vigilar el cumplimiento de la normativa sobre la obligación del uso de envases irrellenables de los aceites de oliva y de orujo de oliva en los establecimientos del sector de hostelería y restauración y los servicios de catering, así como instar a la Unión Europea a que se establezca una norma similar a escala comunitaria.

18.    Búsqueda y utilización de canales de distribución no convencionales.

19.    Promover la colaboración entre olivareros y empresas del sector que tienen bien posicionadas sus marcas, de manera que permita que los primeros obtengan una mayor remuneración por su materia prima y los segundos amplíen sus mercados.

20.    Internacionalizar las empresas agroalimentarias jiennenses. Cuando se trate de pymes o micro pymes, la mejor solución es la creación de estructuras de cooperación para la internacionalización.

21.    Desarrollar las TIC en el sector oleícola. El uso de las TIC es especialmente importantes para que las Pymes puedan aprovechar plenamente las oportunidades que les ofrece el mercado exterior.

22.    Fomentar una mayor orientación al merado en el sector productor oleícola, de tal modo que sea consciente de que, actualmente, no todo lo que se produce se vende y, en consecuencia, hay que producir aquello que se puede vender.

EJE 4. I+D+i, Transferencia de conocimientos y formación

23.    Profesionalizar toda la cadena de valor de los aceites de oliva, por medio de acciones formativas específicas para todas y cada una de las etapas del proceso productivo.

24.    Instar a las Administraciones a destinar recursos a la profesionalización del sector oleícola que permita incorporar capital humano cualificado a las industrias oleícolas capaz de tomar consciencia de la necesidad de un cambio en su gestión y con capacidad de afrontar procesos de innovación institucional.

25.    Continuar fomentando las medidas de apoyo a la investigación, desarrollo tecnológico e innovación, potenciando los aspectos saludables de los aceites de oliva, la sostenibilidad del olivar, los estudios de las nuevas analíticas y su evolución, la mejora en la gestión y las estrategias para una mayor orientación al mercado e internacionalización.

26.    Potenciar la transferencia del conocimiento desde los centros de investigación hacia los sectores productivos. En este sentido, es conveniente realizar unas Jornadas de Transferencia entre los/las investigadores/as y los sectores productivos, especialmente el oleícola.

EJE 5. Política Agraria Común – PAC (2014-2020)

1.    Demandar que el olivar en pendiente y de baja producción sea sector  beneficiario de los pagos acoplados dentro del Primer Pilar de la  PAC, ante el riesgo real de abandono.

2.    Promover la activación de los mecanismos de regulación y gestión del mercado y aglutinación de la oferta, para conseguir estabilidad en los mercados y mantener las rentas de los/as oleicultores/as.