Olimerca.- La próxima campaña de aceituna de mesa se espera que sea temprana y cargada de incertidumbre. Así lo prevé la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos –COAG- de Andalucía, en su primera estimación.

En este sentido, el responsable de Aceituna de Mesa de COAG Andalucía, Antonio Rodríguez, afirma que este año la recolección se adelantará, dando comienzo en el mes de septiembre o, incluso, antes en algunas variedades y comarcas.

“A menos de dos meses de la próxima campaña de la aceituna de mesa, ésta se presenta con bastante incertidumbre –destaca Rodríguez-. Según los aforos de nuestros técnicos, ésta será una cosecha algo superior de la del año pasado, con gran calidad y buenos calibres, pero inferior a las últimas cinco campañas, no llegando a las 500.000 toneladas”.

Este año la recolección se adelantará, dando comienzo en el mes de septiembre o, incluso, antes en algunas variedades y comarcas.

Según explica el responsable del sector, debido al Covid-19, COAG ha propuesto una reunión en la Interprofesional para tratar el tema de las medidas a tomar para la recolección, “así los agricultores tendrán tiempo suficiente para organizarla. Especialmente, en las variedades que se recogen a mano, como son la manzanilla y la gordal, ya que la mecanización de éstas es imposible, a pesar del gran esfuerzo de investigación y económico que hace la Interprofesional, pero con resultados negativos”.

Incertidumbres
Antonio Rodríguez señala que una de las incertidumbres se refiere a las mejoras en la cadena de valor, con la inclusión de los costes de producción en los contratos. “Hay estudios de costes de valor elaborados por el Ministerio de Agricultura, la Junta de Andalucía y nuestra organización COAG. En ellos, hay que diferenciar dos grandes bloques de costes, según la modalidad de recolección (manual o mecanizada)”.

Afirma que “es el momento de que entre en vigor nuestra propuesta histórica de contratos tipo en la Interprofesional, que además es un objetivo de la actual Extensión de Normas. Los contratos tipo deben tener incluidos los costes de producción actualizados”, explica.

Por otro lado, hay que tener en cuenta otras incertidumbres añadidas: la pandemia y los aranceles americanos, que han afectado más en unas variedades de aceituna que en otras. En este caso, los aranceles han dañado más a la aceituna negra, “por lo que exigimos que la Unión Europea, el Gobierno Español y la Junta de Andalucía solucionen este problema, porque los agricultores no tenemos nada que ver con los aviones Boeing ni con la tasa Google”, dice Rodríguez.