Olimerca.- Hace apenas 15 días que comenzó la cosecha de la aceituna de mesa en Argentina y las previsiones apuntan a fuertes descensos. Concretamente, la variedad que más caerá será la manzanilla, que por cuestiones climatológicas, su producción podría reducirse hasta un 70%. Sin embargo, la producción cuenta con una excelente calidad y un buen tamaño en todo el país.

Asimismo, esta campaña está marcada en Argentina por el incremento del coste energético, que complican aspectos como la disponibilidad de agua para riego en provincias sustancialmente desérticas. Según señalan medios locales, como Diario de Cuyo, muchas empresas han sido obligadas a reducir las horas de riego y con ello la productividad por hectárea.

A ello se une también la falta de mano de obra especializada, que sigue siendo un tema crucial a la hora de desarrollar esta actividad en el país. Aunque también es cierto que la mecanización de los trabajos de recolección va en aumento año tras año.

Por otro lado, se ha puesto un impuesto específico a las exportaciones que va entre el 10 y el 13%, según el tipo de cambio, lo que condicionará la oferta exportable. Sin embargo, el aumento de la demanda de aceituna de mesa en EEUU y otras naciones potenciará y mejorará la posición y condiciones de negociación internacional para Argentina.