Olimerca.- Hoy, 22 de marzo, se celebra el Día Mundial del Agua y con este motivo, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación quiere pone en valor la agricultura de regadío, por su aportación a la sostenibilidad socioeconómica del medio rural, y su contribución a la fijación de la población, a la sostenibilidad ambiental y al mantenimiento del paisaje y de la biodiversidad.

Esta agricultura de regadío supone más del 65% de la producción vegetal, integrándose en un sistema agroalimentario que, en su conjunto, contribuye a la economía española en aproximadamente un 11%, dando trabajo según datos de 2016 a 2,6 millones de personas.

España es el primer país en superficie de regadío de la Unión Europea, con 3.733.695 ha, lo que supone un 22 % de la superficie cultivada, de la cual el 50% es riego localizado, lo que nos sitúa a la cabeza en superficie de riego localizado a nivel mundial. Este sistema de riego está implantado, fundamentalmente, en cultivos leñosos típicamente mediterráneos como el olivar, el viñedo, los frutales cítricos y no cítricos y en hortalizas. La otra mitad de nuestra superficie de riego se divide casi a partes iguales entre el riego por aspersión y el riego por gravedad.