Europa importó 7,2 millones de toneladas de aceite de palma en 2017.

Olimerca.- El 74% del aceite de palma utilizado por la industria alimentaria en Europa está certificado como sostenible por la Roundtable on Sustainable Palm Oil (RSPO). Así lo señala el informe de ESPO (European Sustainable Palm Oil) ‘Choosing sustainable palm oil - Progress report on the import and use of sustainable palm oil in Europe’, en cuya elaboración ha colaborado la Fundación Española del Aceite de Palma Sostenible.

ESPO es una de las organizaciones comprometidas con la Declaración de Ámsterdam, una alianza alcanzada por varios países europeos (Dinamarca, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Noruega y Reino Unido) para lograr una cadena de suministro de aceite de palma 100% sostenible en Europa en 2020. A pesar de que España no se ha adherido aún a la Declaración de Ámsterdam, la Fundación Española avanza en este objetivo a nivel nacional.

Este informe indica también que el 99% del aceite de palma que entra en Europa es rastreable hasta el molino o almazara, y más del 84% del aceite de palma importado a Europa está cubierto por las políticas de sostenibilidad de las empresas ‘No Deforestación, No siembra en humedales (peatlands) y No explotación de los trabajadores’.

En términos absolutos, Europa importó 7,2 millones de toneladas de aceite de palma en 2017, el 12% de la importación mundial, según Oil World 2018. De esta importación, 3,8 millones de toneladas fueron utilizadas para la industria alimentaria, mientras que el resto, 3,4 millones de toneladas, fueron dirigidos al sector energético. El total de la importación dirigida a biocombustibles en Europa debe cumplir con la Renewable Energy Directive (RED), que tiene su propio sistema obligatorio de certificación de sostenibilidad.

El total de los datos de importación de aceite de palma en Europa es igual al total de aceite de palma utilizado, si bien existen diferencias significativas en el comercio entre los diversos estados miembros. Por ejemplo, en este sentido, existen países como Países Bajos que exportan un volumen significativo a otros países de la Unión Europea, mientras que otros, como Polonia, importan la mayor parte de este ingrediente de otros países europeos.