Olimerca.- Tras un periodo de adaptación de tres años para que las empresas fabricantes de productos fertilizantes hicieran una transición hacia los fertilizantes orgánicos,  desde el pasado 16 de julio ha entrado en vigor la nueva reglamentación comunitaria.

Este nuevo reglamento impulsará la comercialización de más fertilizantes orgánicos y a base de residuos, ayudando a reducir el impacto de esos productos sobre el medioambiente.  El objetivo de la Comisión Europea es lograr paulatinamente reemplazar el 30% de los fertilizantes de origen mineral. El reglamento cubre una amplia gama de productos fertilizantes, que incluyen materiales calcáreos, sustancias para mejorar el suelo, agentes de crecimiento, bioestimulantes de plantas y mezclas.

Según se recoge en un comunicado «Este es un paso importante hacia la agricultura sostenible, uno de los objetivos del Pacto Verde Europeo. Las nuevas normas abrirán el mercado único a los fertilizantes orgánicos y basados en residuos. Establecerán valores límite para los contaminantes tóxicos en los productos fertilizantes y permitirán la armonización opcional». Al mismo tiempo, la normativa limitará el riesgo para la salud humana y reducirá la dependencia de Europa de los fertilizantes importados.

Con esta normativa se estima que en el futuro los fertilizantes elaborados con material de desecho orgánico podrían reemplazar el 30% de los fertilizantes extraídos. En paralelo, la Comisión también ha publicado un documento de orientación sobre el etiquetado de los productos fertilizantes en la UE.