Olimerca.- Era de esperar. Tras casi dos meses de práctica contención de los precios de todas las categorías de aceite de oliva; en diciembre la gran distribución ya ha reflejado un incremento de precios del aceite de oliva refinado en los lineales de los principales centros comerciales.  Así, la subida del aceite de oliva refinado en los supermercados e hipermercados ha sido del 12,4%, pasando de los 7,15€/litro a los 8,15€/litro; o sea un aumento de un euro casi de manera unánime.

Llama la atención que la categoría de aceite de oliva virgen extra y virgen se han salvado en esta ocasión de esta subida de precios, con lo que todas las centrales de compra mantienen el Virgen Extra en los 9,25€/litro. No obstante, y a tenor de la revolución alcista que se ha vivido en el mercado del aceite de oliva en origen durante el mes de diciembre, nadie duda ni un ápice que en este mes de enero vamos a asistir a una nueva revolución de los precios  en el lineal, aunque todavía es una incógnita en qué porcentaje subirá.

La gran duda es: ¿mantendrá el consumidor la confianza en el aceite de oliva de la marca blanca cuando su precio supere los 11-12€?  ¿O acaso podría llegar a igualarse a los PVP de las marcas de los fabricantes que ya se pueden encontrar en el lineal entre los 13€ y los 18€?

Lo que si está meridianamente claro es que tenemos por delante un año convulso en la fijación de precios, y además sin olvidar que en otros países tampoco nuestro sector industrial envasador va a poder encontrar mercancía a mejor precio que en España. Ya no sólo es preocupante la futura caída del consumo de aceite de oliva en España, sino también la que se avecina en el mercado exterior, tan sensible siempre a la evolución alcista de los precios.