Muelle de un puerto

Olimerca.- Los agricultores de la Unión Europea van a recibir un impulso el próximo mes a medida que el acuerdo de asociación económica entre la UE y Japón (EPA) entre en vigor. Los esfuerzos para reducir las barreras que han impedido que los exportadores agrícolas de la UE lleguen a los 126.000.000 consumidores de Japón han dado sus frutos, con el 85% de los aranceles sobre las importaciones agrícolas reducidos o eliminados. Además, ha habido una serie de barreras no arancelarias que ya no se aplicarán, ayudando a minimizar la burocracia y simplificando el proceso de exportación, un beneficio particular para los pequeños productores.

Muchos productos se benefician dos veces del acuerdo, y la Unión Europea también garantiza el reconocimiento japonés de más de 200 indicaciones geográficas (IG). El reconocimiento de IGP, que protege el conocimiento tradicional de los productores y tranquilizará a los consumidores japoneses.

Para la agricultura europea, el AAE UE-Japón representa una oportunidad notable. Con el reconocimiento de las indicaciones geográficas de la UE, las reducciones de los aranceles y la eliminación de una serie de obstáculos técnicos al comercio, el acuerdo representa un avance significativo para los productores europeos y los consumidores japoneses por igual. Aumenta la vitalidad y la prosperidad de las zonas rurales de Europa, al tiempo que amplía las opciones disponibles para el público japonés.


La industria del vino se ha convertido en uno de los mayores beneficiarios de las negociaciones, con aranceles que bajaron del 15% al 0%. Esto no solo ahorrará 134 millones de euros para los productores de la UE, sino que también hará que los vinos de la UE sean más competitivos, lo que permitirá a los vinos europeos aumentar su cuota de mercado. Sin embargo, no solo las reducciones arancelarias beneficiarán a los viñedos europeos, ya que Japón también ha acordado autorizar una serie de prácticas enológicas que son comunes en la UE, reduciendo los costos administrativos para los exportadores.

Aumenta la vitalidad y la prosperidad de las zonas rurales de Europa

También hay buenas noticias para los productores de carne de la UE, ya que la carne de cerdo recibió un impulso de un cambio en el sistema japonés de aranceles y los productores de carne de res recibieron un impulso a través de una reducción de los aranceles. El sistema de precios de puerta japonés, que anteriormente era complejo, debe ser reemplazado, lo que aumenta la confianza y la seguridad entre los exportadores europeos al tiempo que proporciona un acceso prácticamente gratuito al mercado.

La reducción arancelaria para los productos de carne de res será más gradual, pero en última instancia dará lugar a una caída significativa del 25,5%. Estas reducciones, que hacen que las importaciones de la UE a Japón sean considerablemente más competitivas, abrirán una nueva gama de oportunidades para los productores europeos y permitirán que brille la sólida reputación de los productos agroalimentarios de la UE.

Los compradores japoneses también podrán disfrutar de quesos europeos a precios más competitivos en el futuro, con los aranceles sobre los quesos duros que bajarán gradualmente a 0% durante un período de 15 años y los quesos blandos disfrutarán de una nueva cuota libre de impuestos equivalente a la cantidad actual de exportaciones europeas .