Olimerca.- La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) teme que las nuevas tarifas eléctricas que entraron en vigor ayer, 1 de junio, acaben por disparar la factura energética por los excesos de potencia, por lo que recomienda evitarlos en la medida de lo posible y realizar ajustes en las potencias contratadas y las horas del día óptimas para el consumo de energía.

Fenacore considera esta subida como un mazazo para los regantes, después de que su factura eléctrica haya subido más del 120% desde 2008. Un encarecimiento que además de suponer un freno para el proceso de modernización, no entienden que responda a los esfuerzos que han realizado para ahorrar un 16% en el consumo de agua durante la última década.

Por ello, recientemente pidió complementar los cerca de 560 millones de euros que recogen los fondos europeos para modernización de regadíos con el desarrollo de una disposición reglamentaria para que los regantes puedan firmar dos contratos eléctricos al año -tal y como se aprobó en la disposición final de la Ley de Presupuestos Generales del Estado de 2021-, lo que según sus cálculos les permitiría ahorrar al menos un 20% de sus costes eléctricos, contribuyendo asimismo a modernizar el casi millón de hectáreas aún pendiente.

Fenacore recuerda que los cambios tarifarios conllevan una modificación y un desdoblamiento en los precios del término de potencia y de energía, así como la desaparición de los tres periodos y la instauración de seis. También la reducción de las horas más baratas y el aumento de las más caras, lo que a la postre impedirá una gestión eficiente de la energía y la implantación de fotovoltaica.