Olimerca.- Dieta Mediterránea rica en aceite de oliva virgen extra, entre otros alimentos, podría proteger contra la pérdida de memoria provocada por el Alzhéimer. Esta es la conclusión a la que ha llegado un estudio publicado en la revista Neurology de la Academia Americana de Neurología. Y es que estos alimentos en los que se basa nuestra dieta protegen el cerebro de la acumulación de proteínas y del encogimiento que puede provocar la enfermedad de Alzhéimer. 

El estudio, según publica Europa Press, analiza las proteínas anormales llamadas amiloide y tau. El amiloide es una proteína que se forma en placas, mientras que la tau es una proteína que se forma en ovillos. Ambas se encuentran en los cerebros de las personas con la enfermedad de Alzhéimer, pero también pueden encontrarse en los cerebros de las personas mayores con una cognición normal. 

Según el autor de esta investigación, Tommaso Ballarini, del Centro Alemán de Enfermedades Neurodegenerativas (DZNE), "nuestro estudio sugiere que una dieta rica en grasas insaturadas, pescado, frutas y verduras, y baja en productos lácteos y carne roja, puede proteger el cerebro de la acumulación de proteínas que puede conducir a la pérdida de memoria y la demencia.

Datos del estudio
El estudio analizó a 512 personas, de las que 169 eran cognitivamente normales y 343 tenían mayor riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzhéimer. Los investigadores analizaron el grado de seguimiento de la Dieta Mediterránea en función de sus respuestas a un cuestionario en el que se les preguntaba cuánto habían comido de 148 alimentos durante el mes anterior. 

Los resultados de este estudio sugieren que las personas pueden reducir su riesgo de desarrollar Alzhéimer incorporando más elementos de la Dieta Mediterránea a su alimentación diaria

Las personas que a menudo comían alimentos saludables típicos de la Dieta Mediterránea, como pescado, verduras y fruta, y que sólo ocasionalmente comían alimentos no típicos de la dieta mediterránea, como la carne roja, recibieron las puntuaciones más altas, para una puntuación máxima de nueve. 

Las habilidades cognitivas se evaluaron con un amplio conjunto de pruebas para la progresión de la enfermedad de Alzhéimer que analizaban cinco funciones diferentes, como el lenguaje, la memoria y la función ejecutiva. 

A todos los participantes se les hicieron escáneres cerebrales para determinar su volumen cerebral. Además, se analizó el líquido cefalorraquídeo de 226 en busca de biomarcadores de proteínas amiloides y tau. A continuación, los investigadores analizaron el grado de seguimiento de la dieta mediterránea y su relación con el volumen cerebral, los biomarcadores tau y amiloide y las habilidades cognitivas. 

Tras ajustar factores como la edad, el sexo y la educación, los investigadores descubrieron que, en la zona del cerebro más relacionada con la enfermedad de Alzhéimer, cada punto menos que las personas obtenían en la escala de la dieta mediterránea equivalía a casi un año de envejecimiento cerebral. Al analizar el amiloide y la tau en el líquido cefalorraquídeo de las personas, las que no seguían la dieta al pie de la letra tenían niveles más altos de biomarcadores de patología amiloide y tau que las que sí lo hacían. 

A la hora de realizar una prueba de memoria, las personas que no siguieron la dieta al pie de la letra obtuvieron peores resultados que las que sí lo hicieron.

Se necesitan más investigaciones para demostrar el mecanismo por el que una dieta mediterránea protege al cerebro de la acumulación de proteínas y de la pérdida de funciones cerebrales, pero los resultados sugieren que las personas pueden reducir su riesgo de desarrollar Alzhéimer incorporando más elementos de la Dieta Mediterránea a su alimentación diaria", apunta Ballarini.