Fernando Miranda- Secretario General del Mapama

Olimerca.- “Las cosas de palacio van despacio” y sino que se lo pregunten a los políticos y técnicos de las distintas administraciones que en estos momentos están abordando la solicitud de las cooperativas españolas de retirar del orden de 300.000 toneladas de aceite de oliva para poder sostener los precios y evitar un mayor descalabro a los agricultores.

Ayer, el Secretario General de Agricultura del Mapama, Fernando Miranda, lo dijo muy claro “ Al ritmo al que se están desarrollando los trabajos esta media no podrá estar aprobada antes de cuatro o cinco meses”.

Miranda afirmó que la herramienta para el almacenamiento privado, que cuenta con el apoyo del Ministerio, fue recibida con una “actitud positiva” por parte de la Comisión, por lo que ha confiado en tenerla lista “cuanto antes”, pero antes se necesita el aval de las autoridades de competencia que tienen que evaluar el efecto de esta medida sobre el consumidor.

“Cada uno debe de saber en qué división juega. Estamos vendiendo la máxima calidad con formatos no acordes”

El lado positivo de esta medida es que con su aprobación el sector olivarero español contará en los próximos años con una medida de actuación que ayudará a controlar los temidos dientes de sierra en campañas de grandes como cortas producciones y por ello la volatilidad de los precios. En esta línea, Miranda ha remarcado que se trata de demostrar que al reducir la oferta no se perjudica a los consumidores.

Desde la visión de Olimerca, esta demora en los plazos de aprobación podría suponer para el sector que la medida tan ansiada llegue en el peor momento: cuando estamos en plena recolección y cuando nuestras bodegas se están llenando, y sobre todo cuando el resto de países ya tienen a la venta los nuevos aceites de la cosecha. Todo ello hará que esta autoregulación no tenga apenas efecto sobre los precios en origen, que en la próxima campaña no dependerá de España sino de nuestros países competidores.

Calidad y calidad
Por último, el Secretario General afirmó que hay que seguir apoyando y defendiendo a las DOP que son ejemplo de “Calidad en mayúsculas”. Una calidad diferenciadora muy importante para gran parte del territorio a la que se podrían unir determinados olivares tradicionales que podrían encontrar en estas etiquetas de calidad una garantía de su futuro.

Finalmente, Miranda dejó una frase para la historia “Cada uno debe de saber en qué división juega. Estamos vendiendo la máxima calidad con formatos no acordes”