Banco de Germoplasma

Olimerca.- Aunque desde lejos parezca que el mercado del aceite de oliva es una balsa de aceite, en el fondo, en estos primeros días del mes de octubre, se ha observado la existencia de un pulso real entre los industriales envasadores y productores a la hora de fijar un precio en origen para las categorías de virgen y lampante.

A estas alturas de la nueva campaña, es una realidad que la aceituna va retrasada en su proceso de maduración, del orden de dos semanas. Tanto en España como en Portugal son muy escasas las almazaras que han abierto sus puertas para recoger la aceituna temprana. Y por ello no es de extrañar que todo el mundo esté haciendo cábalas sobre cuanto aceite queda en las almazaras y envasadoras para poder esperar la entrada en los circuitos de comercialización de los nuevos AOVE a mediados o finales de noviembre.

Y en este contexto, en un mercado que durante esta semana se puede decir que ha sido escasamente operativo, se puede hablar de que las únicas tentativas de operaciones se han centrado en las categorías de virgen y lampante con precios que se movían para los refinables en las 2.35/2.40€/kg, mientras que para la categoría de virgen la oferta no bajaba de los 2.45 y la demanda no subía por encima de los 2.40€/kg.

En paralelo, las cooperativas se enfrentan estos próximos meses al periodo de liquidación de sus socios, y ya todo el mundo auguro que se van a vivir momentos de tensión, puesto que todos miran al vecino de al lado para ver a cómo le liquidan.

Y pensando en el comportamiento de los precios para los primeros meses de 2019, ya se han perfilado algunos intentos de fijar los precios de un aceite para refinar en el entorno de los 2.20€/kg; mientras que para la categoría de extra la horquilla de precios se mueve entre los 2.90€/kg y los 3.00€/kg.