Olimerca.- La propagación de la Xyella fastidiosa en Italia ha dado un giro, y ahora se propaga por nuevas provincias, llegando a la de Taranto, donde se han detectado seis olivos en Montemesola y uno en Crispiano. Así lo han comunicado desde Coldiretti, tras una inspección realizada por el Ministerio italiano de Agricultura.

Se trata de “una masacre”, afirman desde la asociación de empresarios agrícolas italianos, que avanza a una velocidad de más de dos kilómetros al mes y, tras haber devastado la zona de olivar de Puglia, corre el riesgo de infectar todo el sur de Italia, desde Basilicata hasta Calabria, Campania y Molise, afirman desde Coldiretti.

Según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), la Xylella amenaza la mayor parte del territorio de la UE donde, entre otras cosas, se han identificado otros casos de enfermedades, desde Francia a España, desde Alemania a Portugal. En este sentido, los responsables de Coldiretti destacan que desde el otoño de 2013, fecha en que se determinó en una parcela de olivos en Gallipoli, la enfermedad se ha extendido sin contar con unas directrices específicas que se puedan aplicar para detener la infección.

“Después de años de errores, incertidumbres y culpas, se necesita un cambio decisivo de ritmo con la aprobación en el Parlamento del Decreto de Emergencia, que debe de ser profundamente modificado en comparación con el enfoque inicial, para apoyar a los agricultores afectados en el área infectada que solo quieren poder plantar nuevos olivos y no morir de Xylella con variedades resistentes a la bacteria, como la Leccino”, destacan desde la asociación italiana.

Asimismo, concluye que es necesario “intervenir para detener la propagación de la enfermedad, mientras que en las áreas infectadas es necesario encontrar sistemas adecuados de coexistencia, tales como injertos e injertos con variedades resistentes”.