Olimerca.- ¿Qué ha significado la UJA en la evolución del sector del aceite de oliva en Jaén?
Juan Gómez.- Aunque a esta pregunta debería contestar el propio sector, sí me gustaría destacar el fuerte compromiso que la Universidad de Jaén tiene tanto con su entorno más cercano, como en particular por el sector oleícola, a través del desarrollo de las funciones que se nos tienen encomendadas, tanto las tradicionales de formación o investigación (I+D+i), como otras nuevas como la empleabilidad o la internacionalización, desde la excelencia y la diversidad en lo académico y desde el compromiso en el servicio público, a través de la especialización y la diferenciación.

Con ello, desde la Universidad de Jaén se ha contribuido a que el sector tenga una mayor formación y por lo tanto esté más profesionalizado y apueste cada vez más por la calidad, como así lo atestiguan los numerosos premios que tanto a nivel nacional como internacional reciben sus aceites de oliva virgen extra.
Pero también me gustaría dejar claro que la Universidad no puede ser ni mucho menos la solución a los problemas del sector, aunque estoy convencido de que podemos ser de gran ayuda.

Olimerca.- ¿Qué importancia tiene el aceite de oliva y el olivar en la UJA?
Juan Gómez .- Desde que la investigación llegó al sector del olivar muchos e importantes han sido los avances, y la creación de la Universidad de Jaén ha sido clave. Dichos avances han repercutido en la mejora de la vida de los ciudadanos, en el desarrollo social y en el crecimiento económico.

Para hacerse una idea de la importancia que este sector tiene para la UJA, de los 115 grupos de investigación con los que contamos, un total de 39 desarrollan líneas relacionadas directamente con el olivar y el aceite de oliva, a los que se suman otros 12 que trabajan de forma más transversal. La investigación desarrollada por la Universidad de Jaén supone un importante valor que abarca todas las áreas científicas, desde el cultivo del olivar, hasta los beneficios del aceite de oliva para la salud, pasando por la extracción del aceite de oliva, el aprovechamiento de los residuos agrícolas, el tratamiento de plagas, el estudio de su genoma o la comercialización. Todas estas líneas y otras muchas más constituyen un importante catálogo de I+D+i relacionado con este sector, que supone una oportunidad de colaboración mutua entre éste y la Universidad. Además, la Universidad de Jaén cuenta con el Centro de Estudios Avanzados en Olivar y Aceite de Oliva, un centro de investigación que pretende convertirse en referente a nivel internacional, que agrupa investigadores, recursos y medios instrumentales suficientes que consolidan y permiten el avance del conocimiento, el desarrollo y la innovación en este sector, mediante la docencia, la investigación científica y el desarrollo tecnológico de excelencia.

Por otro lado, la universidad jiennense apuesta firmemente por la transferencia del conocimiento y por compartir el resultado de sus investigaciones para favorecer el progreso económico y social. En este sentido, la UJA transfiere a las empresas y la sociedad el resultado de estas investigaciones para favorecer el progreso económico y social. Esta transferencia se ha traducido en la firma de 119 contratos de investigación en los últimos 10 años, por un importe de 2,5 millones de euros, así como en la creación de 7 Empresas Basadas en el Conocimiento y el desarrollo de 21 patentes.

Olimerca.- ¿Qué asignaturas pendientes tiene todavía el sector del aceite de oliva?
Juan Gómez .- Como señalaba anteriormente, es fundamental que se mejore y aumente la profesionalización y modernización del sector. En este aspecto, la Universidad puede aportar un valor añadido importante en cuanto a formación, que debe ser importante para este sector como lo es en otros sectores productivos. Una mayor profesionalización debe ser, a mi juicio, un objetivo, un reto. Y esto requiere una mejor formación.

La Universidad no puede ser  la solución a los problemas del sector, aunque estoy convencido de que podemos ser de gran ayuda

La Universidad apuesta por ello y el sector debe hacerlo también. En este sentido, la UJA imparte una variada oferta de especialización en el área oleícola, como, por ejemplo, el Máster Oficial en Olivar, Aceite de Oliva y Salud, el programa de Doctorado en Aceite de Oliva o el Título de Experto Universitario en Cata de Aceites de Oliva Vírgenes, en el que colabora el Comité Oleícola Internacional y que ha formado a más de 300 catadores de todo el mundo. Una oferta formativa a la que hay que sumar otras acciones organizadas desde los distintos Departamentos o Cátedras universitarias como cursos, jornadas o seminarios relacionados con el sector, como por ejemplo el III Congreso Internacional sobre Aceite de Oliva Virgen, Olivar y Salud, que se celebrará del 18 al 20 de mayo, que convertirá de nuevo a Jaén en referente internacional sobre la investigación en estos ámbitos gracias a la participación de reconocidos investigadores, que expondrán los últimos avances científicos sobre aceite de oliva y salud.

Olimerca.- Tras varios años de crisis a nivel de financiación ¿Cómo afronta el futuro la UJA?
Juan Gómez.- La situación económica de crisis ha afectado y continúa afectando a las universidades en todos sus ámbitos de actividad y, muy especialmente, a las expectativas profesionales de sus plantillas, al desarrollo de la investigación y al sistema de becas para el alumnado.
En el caso concreto de la Universidad de Jaén, nuestro presupuesto medio anual se sitúa entorno a los 100 millones de euros. Nuestra situación financiera es buena, como consecuencia de una gestión responsable de los anteriores equipos de gobierno de la Universidad. Creo que estas buenas prácticas han de reconocerse y premiarse, permitiendo que las universidades que hayan gestionado eficientemente sus recursos puedan acometer proyectos necesarios y estratégicos para su desarrollo universitario y el del territorio en el que están ubicadas. Aunque la situación de tesorería es mejorable, pagamos las nóminas puntualmente y a los proveedores en un plazo medio de 15 días.
Esto es muy importante para la viabilidad de nuestras empresas proveedoras y es parte de nuestra responsabilidad social universitaria.

Olimerca.- ¿Es posible una mayor colaboración económica por parte del sector privado?
Juan Gómez.- Sin duda. De hecho, están surgiendo nuevos mercados, con clientes con diferentes expectativas, en donde la cultura del aceite tiene también una oportunidad. Están apareciendo nuevos productores con diferentes características, lo que entiendo siempre como una oportunidad. Nosotros como país y provincia referente en la producción de aceite de oliva deberíamos convertirnos en líderes en este sentido y ver este escenario como una oportunidad y no como una amenaza. En definitiva, entiendo que la investigación, el desarrollo y la innovación son esenciales para el futuro desde diferentes prismas del sector.