Olimerca.- La cosecha de aceite de oliva se recuperará en esta campaña de la espectacular caída experimentada en la anterior, estimándose una producción de 1.418.000 toneladas, si bien esta cifra está aún por debajo de las 1.615.000 toneladas que se produjeron hace dos campañas, debido a los efectos causados por la sequía general y por las heladas que ha afectado a todas las provincias productoras y singularmente a Andalucía.

Esta fue una de las estimaciones que se expusieron en la XXI Jornada de Olivar de ASAJA-Sevilla, y que fue presentada ayer por el técnico de ASAJA-Sevilla, José Vázquez, en base a los análisis realizados por sus técnicos.
Según Vázquez, las tempranas heladas y la sequía harán descender un 1,5 por ciento los rendimientos del aceite, por lo que la cosecha alcanzará las 1.133.000 toneladas. Esto supone una reducción de casi el 14 por ciento con respecto al aforo adelantado por la Consejería de Agricultura, que estimaba una producción de 1.312.000 toneladas en Andalucía.

En el caso de Sevilla, la calidad del aceite está siendo muy superior, lo que va a ser un factor importante en los precios, pues si bien los olivares sevillanos están sufriendo también la sequía, las heladas se están cebando más con otras zonas del interior de Andalucía, donde se están produciendo daños en cantidad y en calidad.

En cuanto al mercado, continúa en niveles bajos, aunque recuperará posiciones a medida que se conozca la producción real, muy distinta de los aforos optimistas que adelantó extemporáneamente la Administración. Asimismo, dicho repunte de precios será más efectivo una vez que desciendan las entregas masivas que se están produciendo en estas semanas por la ausencia total de lluvia, que está facilitando la recolección. 

La jornada fue inaugurada por la alcaldesa del Ayuntamiento de El Rubio, Ramona Ramos, el director de la Agencia de Aceite de Oliva, José Miguel Herrero, el presidente de Agrícola El Rubio, Eduardo Martín Pérez, y el presidente de ASAJA-Sevilla, Ricardo Serra.

Mejora de la cadena alimentaria y reforma de la PAC
Abrió el turno de conferencias técnicas el director de la Agencia de Aceite de Oliva (AAO), José Miguel Herrero, quien expuso las principales novedades de la ley de la cadena alimentaria que entrará en vigor el 3 de enero de 2014 y cuyo cumplimiento será controlado por la futura Agencia de Información y Control Alimentario que absorberá las competencias de la actual Agencia para el Aceite de Oliva y la Aceituna de Mesa. 

El director de la AAO destacó que esta ley “es pionera en el mundo” y pretende terminar con las malas prácticas comerciales en el sector agroalimentario. Prácticas que se han visto agravadas con la crisis, que ha llevado a las familias a centrarse más en los precios de los productos que en la calidad, lo que ha potenciado la guerra de precios en los grandes grupos de la distribución así como el empleo de productos reclamo, que perjudica especialmente a un producto tan demandado como el aceite de oliva.

Como explicó Herrero la Ley incluye mecanismos de regulación y auto-regulación, y entre ellos destacó un articulo por el que se obligara en las transacciones económicas de más de 2.500 euros a formalizar un contrato por escrito donde deberá quedar reflejado un precio fijo o bien un precio que se pueda determinar con un indicador concreto eliminando así la entrega a resultas. 

Asimismo la ley regulará las subastas electrónicas, prohibirá los pagos atípicos o las modificaciones con carácter retroactivo y obligará además a que todas las negociaciones queden archivadas con su documentación correspondiente durante dos años. Lo que permitirá que la nueva Agencia, con competencia para realizar inspecciones, las supervise. 

A continuación, el técnico de ASAJA-Sevilla, José Manuel Roca, expuso la situación actual de la reforma de la PAC con especial incidencia en el sector del olivar e informó sobre los nuevos Reglamentos comunitarios adoptados en el Consejo de Ministros los pasados 16 y 17 de diciembre.

Roca explicó el nuevo modelo de ayudas basado en las comarcas agrarias, que a su vez tendrá en cuenta los distintos tipos de cultivo, entre ellos los cultivos permanentes, como el olivar, y destacó que finalmente se ha logrado en las negociaciones que el olivar y el resto de cultivos leñosos queden exentos de cumplir requisitos adicionales para la percepción de las ayuda del “pago verde”.