Olimerca.- El liderazgo de nuestro país en producción de aceite de oliva muy pronto se va a ver reflejado también en el ámbito de la calidad cuando salga a la luz la primera edición de la nueva “Guía del aceite de oliva virgen extra, IBER OLEUM”.

Francisco García Mendoz, Director General de Iber Oleum S.L, ha afirmado a Olimerca que se trata de una nueva Guía en la que hemos buscado diferenciarnos de los actuales concursos y otras guías, tanto nacionales como internacionales.  “Desde que empezamos a pensar en la realización de esta Guía, hemos recogido la opinión de los fabricantes y envasadores que de manera global coincidían en la necesidad de exigir un volumen mínimo de aceite certificado y que las personas que realicen la valoración sensorial sean los mejores expertos en la materia.

Así, en el proceso de elaboración de esta Guía son varios los elementos que les diferencian, o cuanto menos, les dan unas características muy particulares respecto a otras guías o concursos relacionados con el mundo del  aceite de oliva virgen:  

1.- Los catadores. Es el principal activo. Catadores de reconocimiento y prestigio nacional, e incluso internacional, pertenecientes a Laboratorios oficiales de más de 10 provincias de toda la geografía de España.
Así han reunido a expertos en valoración sensorial de la talla de Anuncia Carpio, Brígida Jiménez, José Alba, Juan Ramón Izquierdo, Marino Uceda, Hipólito García, Yolanda Avilés, Fernando Martínez, Santiago Botas, Juan Baseda, Chelo Dolado, Mª Angels Calvo, María Luisa Ruiz, Macarena Díaz, Mari Paz aguilera.

2.- La toma de muestras. Será realizada por personal de la organización o de entidades colaboradoras o asociadas a la empresa, siendo requisito imprescindible la presentación documental de la trazabilidad de la elaboración de los aceites presentados a la valoración sensorial así como de la analítica completa correspondiente que justifique su categoría de “Virgen Extra”.

3.- Tamaño de la muestra. Para buscar una representatividad de las muestras presentadas al concurso, se exigirá un mínimo de kilos de cada aceite para poder ser valorado por el panel test. El depósito donde se encuentre el aceite será señalado y se  recogerán todos los datos en el acta que se redactará en el momento de la toma. No se precintará el depósito en cuestión porque consideran que es una pérdida comercial para el envasador el no poder comercializar su aceite hasta que se decidan los premiados.

Francisco García, confía que este proyecto serio y riguroso despierte el interés y la participación de muchas empresas en la próxima campaña con sus nuevos aceites de oliva virgen extra.