Olimerca.-  Desde el pasado 18 de octubre el sector español envasador de aceite de oliva está sujeto a aranceles por parte de EE.UU ¿Por cuánto tiempo se mantendrán?

Joseph R. Profac.- Es difícil afirmar por cuánto tiempo se podrían mantenerse los aranceles, ya que hay muchos factores impredecibles en juego. Por ejemplo, los aranceles podrían terminar si la Unión Europea pudiera presentar ante la Junta de Apelación de la Organización Mundial de Comercio (OMC) que los subsidios a Airbus han terminado. Pero desafortunadamente, no hay suficientes miembros de la junta de apelaciones dispuestos a escuchar un caso así. Sin olvidar que actualmente los EE. UU están bloqueando cualquier cita adicional para la Junta.

La decisión del árbitro de la OMC sobre el caso de Boeing que se espera en unos meses también podría ayudar a entablar negociaciones que podrían poner fin al arancel. Pero si Europa usa la decisión de Boeing de imponer sus propios aranceles de represalia, en su lugar podría liderar una guerra comercial que iría en aumento.

Además, existe la posibilidad de que el gobierno americano decida utilizar un enfoque de "carrusel" para los aranceles, como se ha sugerido, y que significa que pasados los primeros 120 días de la aplicación de los aranceles el gobierno de EE.UU puede o subir los aranceles hasta el 100%, o bajarlos, o incluso suprimirlos al aceite de oliva e imponerlos a cualquier otro producto. Lo que podría significar un fin anticipado del arancel sobre el aceite de oliva. De momento, hay demasiadas variables para dar una buena respuesta a esta pregunta.

Olimerca.-  ¿Hay margen para negociar entre la UE y los Estados Unidos?

Joseph R. Profaci.- Ciertamente hay margen para negociar, porque no debemos olvidar la importancia histórica de la relación comercial entre los EE. UU. y la UE. Por eso es lógico que la UE se esté preparando para negociar el fin de las tarifas.

En los últimos tiempos he hecho la modesta sugerencia en varios foros de que la U.E. debería considerar reducir su propio arancel, muy alto, sobre los aceites de oliva de los EE. UU.,  porque sabemos por los comentarios realizados en la audiencia pública que USTR considera que esos aranceles son proteccionistas, y respaldan que EEUU aplique una imposición de arancel a los aceites de oliva que entran procedentes del mercado comunitario.

Por otro lado, también hemos visto sugerencias de la administración Trump de que preferirían negociar con países individuales, y no con la UE, lo que puede ser una de las razones por las que los aranceles apuntan a exportaciones importantes de países específicos (por ejemplo, aceite de oliva y aceitunas de España, queso de Italia, whisky del Reino Unido y vino de Francia) en lugar de aplicar los aranceles a los productos independientemente de su origen.

 Olimerca.- ¿Qué alternativas tienen nuestras empresas exportadoras?

Joseph R. Profaci.- En este punto, las empresas españolas deben de implementar otras políticas comerciales que mitiguen los aranceles. Para las pymes puede ser interesante encontrar un centro de distribución en Canadá o México, desde donde podrían enviar sus aceites hacia los Estados Unidos, en partidas valoradas en 800 dólares más o menos sin impuestos. Para las compañías más grandes que pueden estar envasando una mezcla de aceites de múltiples países, podrían buscar segregar la parte de aceite de oliva español y pagar la tarifa solo en el porcentaje español.

Olimerca.-  Qué perfil de aceite se verá más afectado: los premium o aquellos de mayor consumo?

Joseph R. Profaci.- Eso es difícil valorarlo. Las marcas premium pueden tratar de absorber el coste de los aranceles con la esperanza de que no durarán mucho tiempo y que se trata de una  inversión necesaria para mantener a los clientes y el espacio en los lineales. Eso puede ser mucho más difícil de hacer para empresas con gran distribución.

Este texto es un extracto de la entrevista que será publicada en la próxima revista de Olimerca