Olimerca.- Ya tenemos los datos elaborados por la Junta de Andalucía acerca de la próxima cosecha de aceituna y producción de aceite de oliva. Unas cifras que todo el sector esperaba conocer para poder enfrentarse a los próximos meses con una actitud más reflexiva buscando qué posiciones adoptar en la compra venta.

Nos enfrentamos a una campaña en la que, según estimaciones de la Consejería de Agricultura, España producirá 1.150.000 toneladas de aceite de oliva, de las que 884.900 toneladas se obtendrán en Andalucía y donde la provincia de Jaén será la más perjudicada con recortes del orden del 25%. Pero todavía estarían por confirmar los datos de Castilla La Mancha, donde todo apunta a una producción no superior a las 80.000 toneladas o Extremadura donde las previsiones no son nada optimistas.

Además, contamos con un enlace entre campañas de 300.000 toneladas lo que los arrojaría unas disponibilidades para la campaña 2017/18 del orden de 1.500.000 toneladas.

En definitiva, con estas previsiones es lógico que el sector se muestre preocupado por lo que puede suceder en los próximos meses. ¿subirán los precios, dónde estará el techo… faltará aceite para comercializar, caerá más el consumo interior?
Para tranquilidad de todo el sector, en momentos de dudas es conveniente analizar lo que ha sucedido en el pasado para comprender que puede pasar el en futuro y sobre todo aprender de los errores cometidos.

 Evolución de la producción y la comercialización del aceite de oliva a nivel nacional
Campaña  Disponibilidades  Comercialización total (ton) Precio Medio (€/kg)
2005/06 1.136 931  3.36
2009/10    1.653 1.348 1.87
2010/11    1.730 1.380 1.80
2011/12    2.264 1.451 1.85
2012/13   1.551 1.123 2.54
2013/14  2.245 1.641 2.07
2014/15    1.500 1.321 3.05
2015/16    1.700 1.370 3.07
2016/17   1.706 1.408 3.67


Según estas cifras de campañas anteriores, el sector ha conseguido en las tres últimas campañas alcanzar unos niveles de precios aceptables, frente a los 1,80€ ruinosos de la campaña 2010/11, mientras que la comercialización total ha mostrado una gran estabilidad soportada sobre todo por el comportamiento de las exportaciones, que se han comportado con un gran dinamismo frente a una ralentización del mercado interior.

¿Cómo deberíamos de afrontar esta nueva campaña? Lo primero es que deberíamos mantener el nivel de precios de campañas anteriores, para en primer lugar sostener el mercado interior, que es el más sensible a nuevas subidas de precios, y al mismo tiempo favorecer el comercio exterior, tal y como lo hemos venido apoyando.

No debemos de olvidar que este año nos enfrentamos a Turquía, con producciones de 287 mil toneladas, Túnez, que será uno de los países claves en los mercados exteriores con 220.000 toneladas, mientras que Italia aumentará un 75% su producción y Grecia un 54% más, sin olvidar la campaña récord que se espera en Portugal (un 58% más).

A pesar de la menor cosecha de esta campaña, la estrategia del sector debe de enfocarse en evitar subidas descontroladas de precios

En definitiva, si los precios se disparasen en el mercado interior los industriales envasadores podrán encontrar precios más ajustados en otros países del arco mediterráneo con lo que podríamos encontrarnos con que en vez de faltarnos aceite, al final de año nos podría sobrar más de lo previsto.

Las cifras son muy claras. El conjunto del sector ha conseguido el reto de unos precios estables y ajustados a los costes de producción, al mismo tiempo que ha sabido gestionar la comercialización de cada vez mayores volúmenes, sobre todo en el exterior. Qué más podemos decir. Seamos sensatos y no nos tiremos piedras contra nuestro propio tejado.